Soleá
¿Por qué se utiliza?
Se trata de un estilo serio, que busca la catarsis del artista y del público aludiendo a los recuerdos que nos generan una pena o un conflicto interno.
Temática
Es un estilo cuyo nombre refleja el sentimiento de soledad e introspección que imprime. Las letras utilizadas en este cante suelen hacer referencia a la pena causada por la pérdida -no necesariamente referida a la muerte-.
Vestuario
El vestuario utilizado es oscuro y sobrio, ayudando a introducirnos en la atmósfera que genera la soleá. En general, vamos a encontrar pocos complementos en este baile.
¿Cómo se interpreta?
Al igual que la mayoría de bailes del flamenco, la soleá se divide en dos partes. Una primera parte que presenta el estilo y una segunda parte que sirve para finalizar el baile -en este caso, son las bulerías o los jaleos-.
Vamos a presenciar un baile muy solemne y parado en el que el sentimiento que inculca la soleá va a estar presente en cada gesto y movimiento del intérprete.
Un poco de historia
La soleá es uno de los bailes más característicos del género flamenco puesto que reúne todos los elementos esenciales de su estética. Sin embargo, no por ello es el baile más antiguo de este género. Las últimas teorías defienden que estos elementos de la soleá fueron tomados de otro baile más antiguo; las alegrías.
Como palo (estilo), podemos justificar su existencia como un proceso de “gitanización” de las tonadas populares durante los principios del siglo XIX. Este proceso se convirtió en una moda en la época, sentando las bases estético–musicales de las melodías de este y otros estilos como la caña o las seguiyiras.
Por otro lado, el baile tiene sus antecedentes en las boleras de jaleo que a principios del siglo XIX presentaban pasos y elementos que podemos asociar a la etapa previa al flamenco. De estos “jaleos” va a derivar el baile que conocemos hoy, que a niveles históricos, es reciente. Fue estandarizado por la bailaora Rosario ‘La Mejorana’ a finales del siglo XIX.
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